Esta mañana los chicos de Sevilla empiezan los proyectos en los laboratorios.
El grupo de "Genética" va a clonar ADN de sus propias células, como científicos expertos. Otro experimento que llevan a cabo es comprobar si perciben o no el sabor de la feniltiocarbamida simplemente chupando un papel. ¿No notas nada? Entonces eres homocigoto recesivo, ¿a que no lo sabías?
Mientras tanto, el grupo de "Vida artificial" aprende programas informáticos nuevos, como el Netlogo, o a usar CamaraStudio. "Hemos profundizado en los conceptos vida, artificial e inteligencia. Lo mejor para mí ha sido aprender otra forma de multiplicar llamada multiplicación rusa o multiplicación mágica", explica Andrea.
Los chicos de "Electricidad" experimentan en sus propias carnes qué ocurre cuando tocas un generador de Van de Graaff: se te ponen los pelos de punta!! (literalmente). También estudian cómo generar y alterar campo eléctrico y magnético simplemente con un imán y una bobina.
Y los matemáticos de "Criptografía" empiezan el proyecto con un reto: descifrar un código. "Hemos aprendido a encriptar y desencriptar diferentes textos, por ejemplo "en un lugar de la Mancha" de Cervantes, y un fragmento de Edgar Alan Poe. Para mí esta parte ha sido la mejor", cuenta Noelia.
Por la tarde visitamos el Centro Nacional de Aceleradores. Entre otras cosas, aprendemos que los aceleradores de partículas pueden ser utilizados para conocer los materiales que componen objetos importantes como cuadros, libros antiguos, joyas, etc. y también para identificar tumores. Un acelerador puede ocupar toda una habitación y necesitar un aislamiento de hasta 4 metros de hormigón.
Por último, vamos al CABIMER, el Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa, donde nos enseñan distintos tipos de laboratorios, sus instalaciones y el animalario. Nos ponemos la vestimenta de cirujanos y ahí que vamos!!
Hoy ha sido un día muy intenso, necesitamos reponer fuerzas y mañana más. ¡Buenas noches!